Supongo que por pura estadística, no deberíamos guardar esperanza. Por pura estadística, cada letra, cada palabra se hundirá en el abismo del olvido y la entropía, y no tiene caso, voltear la mirada para buscar otra mirada vacía. Por pura estadística, sólo me queda ver pasar pixeles
Archivos de la categoría: Desesperaciones
Acuario
Quizá lo más duro de todo, es que sin importar a dónde nos movamos, a dónde miremos, hay un cristal, una pared de transparencia donde alguien nos mira siempre
Rareza
He decidido, dejarme llevar por las rarezas; no ocultar ni por un segundo más que dentro de mí hay un universo entero en el cual me encuentro con mis hermanas y hermanos, que como yo son habitantes del piso 300
abner
Ayer yo era lo que soy y al morir seguirá siendo Más allá de los mares más allá de las palabras que nunca pronuncio, de las rocas que nunca traspaso… Y sin embargo, aún no ha transcurrido suficiente tiempo para que los huesos de las letras se asomen por detrás de los silencios
Resistiéndose a escribir
Antes, cuando todavía tenía algún sentido, escribía a diario. Al despertar, al acostarme, al comer y al caminar. A toda hora encontraba algo por lo cual y en dónde escribir. Página tras página, palabra tras palabra, acumulaba letras y sentidos hasta que, llegado el momento, las perdía y publicaba. Pero hoy, y tal vez ayer …
Puedes iniciar muchas veces, pero sólo se comienza una vez.
Son casi las doce de la noche. Estoy sentado como hacía mucho tiempo no, escuchando y percibiendo el sonido de mis respiraciones: centrado en la nulidad de mis pensamientos, llego a las conclusiones. ¿Qué conclusiones? Las que sean, porque de a poco uno dice sin decir, y no dice nada. Se cantinflea y se cantinea …
Seguir leyendo «Puedes iniciar muchas veces, pero sólo se comienza una vez.»
El fin del mundo
El fin del mundo llega sin palabras. El fin del mundo es una imagen puesta a la vista de los ojos, en un escritorio que ni siquiera existe. Pero está ahí, recordándome una y otra vez la materialidad del alma. La materialidad de tus ojos, tus ojos que sólo pueden ser vistos desde la orilla …
A la orilla del mundo
Supongo que tarde o temprano nacería de nuevo, en mí, la necesidad de plasmar con letras las palabras. Es decir, las cosas que de una u otra manera se quedarían guardadas en el fondo de mi cabeza, de repente se encuentran arrojadas a una hoja, un teclado, algo. Porque una y otra vez me voy …